Como bien decía Mafalda –o dice, algún día escuché que si tienes una pregunta y abres el libro de Mafalda en cualquiera de sus páginas, esta te dará una buena respuesta- que paren al mundo que me quiero bajar.
La vida va demasiado rápido. Y creo que pega más la velocidad con la que camina este globo terráqueo cuando tienes hijos. Cuando no, las ansias por vivir, hacer, generar, te comen y hay momentos en los que incluso deseas que la vida se acelere aún más… Pero cuando tienes hijos todo es distinto, el amor, la admiración, el disfrute, goce, etc. de la vida te enfrenta a una realidad distinta, a aquella que quieres detener, momentos que no quieres que terminen, sensaciones especiales que quisieran fueran eternas, pedacitos de pies diminutos y manos chiquititas que quisieras se quedaran así por siempre… y nada! En ninguno de los casos somos capaces de intervenir… Ni cuando queremos que este se acelere ni cuando queremos que se detenga… Nada!
Soluciones… Creo que disfrutar al máximo lo que esté pasando… Aprovechar cada segundito… Y he aquí donde vienen mis ganas, mis deseos, mis propósitos… Que aunque para cualquiera pudieran parecer insignificantes y diminutos, para mi en este momento de mi vida son groundbreaking!
Apagar el celular, contar hasta 10 cuando esté perdiendo la paciencia y tenga la capacidad de pensar qué está pasando en ese momento, qué es lo que ustedes necesitan en ese omento, cómo puedo darle la vuelta a la situación para que termine bien, para disfrutar, para recordar ese momento, para que se me llene el corazón en un segundo, para no un día darme cuanta de que ya son grandes sino que vayamos siendo grandes juntos y poco apoco, o lo más poco a poco que se pueda…
Hoy Pedro, ya duermes en cama, con barandales pero en cama. Hoy Tomás te urge ya dormir en la cuna grande, no sólo ya no cabes en la chica, si no que creo que ya es importante que duermas sólo con tu hermano, sin enfermera que te vele el pensamiento, si no sólo con papá, mamá y Pipo, así como va a ser la vida…
Hoy Tomás, ya comes, quizá mejor que Pedro jaja, te saboreas la comida y te enojas si no hay más. Comes espinaca, ejote, papa, zanahoria, manzana, pera, plátano, ciruela, pollo, carne, chícharo, etc.. Te encanta… El problema es únicamente la textura, prefieres todo súper suavecito, tipo Gerber etapa 1, de lo contrario haces una terrible cara de asco, babeas y empiezas a arquearte… jaja… Y justo acabas de comer y alzas tus bracitos para que te saque de tu silla de comer y nos vayamos a pasear…
También te ha dado por toser, creemos que es por imitar al abuelo, que aunque los demás no nos demos cuenta su tos es y será algo muy característico, tanto tú como Pedro reconocieron ese ademán y ambos cuando va a llegar mi papá, tosen jaja…
Y en las últimas semanas haces algo que me derrite… Con todo el esfuerzo, te agarras un dedito de una mano con otro de la otra mano y alzas tus manitas al cielo… las dejas ahí arriba de tu cabeza y volteas a ver quién te está viendo… y en el momento que te decimos “arrrriiiiibbbbbaaaaa”, te sonríes y bajas tus manitas… Es tu nueva gracia!
Y ni qué decir si me río, vas derechito y te ríes tú. O al revés, si tú te estás riéndo, y yo me río, te carcajeas más de la risa. Wow! De esos momentos son de los que hablo! De esos instantes que ya no me quiero perder nunca… Qué podrá papá ganar tipo el doble o cuádruple jaja y aí pueda yo estar sin ningún tipo de pendiente disfrutando de ustedes? De nosotros?
Y sí, disfrutar aunque sean los momentos de estrés, que hoy creo que es cuando más necesitan apapachos, amor, cariños, etc… Antes de venirme de viaje, un día, después de que Letty ya te había bañado y estabas a punto de dormirte, de pronto, empezó el peor berrinche hasta el día de hoy… Llorabas y llorabas, te retorcías, estabas enojado y a la vez muerto y agotado de sueño… No me gustó verte así, quería que te tranquilizaras sólo conmigo, que te durmieras, que te tranquilizaras, y no lo logré, creo que hasta que te cayó el cansancio fuerte fue que te diste por vencido y caíste profundo…
Y están los momentos mágicos, como cuando te volteas y soplas, o el día que de estar de pancita, te pasaste boca abajo y te sentaste solito… o cuando se me ensancha el corazón y gritas, pataleas y lloras hasta que te cargo… Sé y entiendo que la mamitis no es nada buena, peor ahhh que bien se siente!
Se siente bien que estés bien, que sonrías, que yo sepa exactamente qué hacer para hacer de cada momento uno mejor, como el simple hecho de prenderte la luz en al coche para que no esté oscuro o pasarte una crema mientras te cambio el pañal…
Como dice Pedro, “Cuando Tomás sea así de grande”… jaja… Y abre las piernas lo más grande que puede y estira sus brazos… y entonces se vuelve “así de grande” … Y cuando esté “así de grande” Tomasino, como te dice a veces Pedro, va a jugar… Pero Pedro “ya va a tener hijos” Y los va a regañar “porque no se quieren dormir” Y “ no quieren comer”… Y lo peor es que “Los hijos salen caros”, jajajaj Se me cae la baba 2.0
Así diga palabras que me copia aplicadas a la perfección como “Pancho me chorea Ma, dice que se va a llevar a mi nana y no es cierto”… O si estamos hablando de que vamos a ir a Miami, volteas todo preocupado y me dices, “Ma, pero dónde se va a quedar Maricarmen cuando vayamos si ya no vive en Cancun” jajaja… No puedo, podría pasarme horas escuchando todo lo que tu cabeza maravillosa genera…
Lo que sea, soy feliz con ustedes, adoro estar, simplemente estar… Quizá esa felicidad huele a Subway, Y Subway huele a libertad… Quizá esa felicidad es libertad de dejarnos ser, de jugar y hacer lo que en ese momento sintamos ganas, de poder preguntar y tener la capacidad de asombrarse y maravillarse por no encontrar la lengua de las flores… De ponernos un disfraz de Buzz y sentir que vamos al infinito y más allá y trick or treat sea por la diversión y no por la cantidad chica o grande dulces sino por la simple diversión de llegar a casa de alguien y poder, como excepción, gritar en la puerta…
Así que amores míos, hoy nos deseo más de nosotros, más mi para ustedes y más de ustedes para mí! Nos deseo soñar con coches grandes que tengan vidrios y puertas y todo de verdad, nos deseo tener éxito en todo como lo tuvo Pedro para dejar el pañal, nos deseo divertirnos pensando que un día Pedro puede dormir en la cuna y otro en la cama y así cambiar con Tomás, nos deseo que hagamos lo que está en nuestras manos para que ese tiempo que corre sin parar, mientras está con nosotros se disfrute más a sí mismo para que nosotros nos podamos disfrutar más a nosotros mismos….
Y ahora, sentada en el 3ª con destino a verlos y abrazarlos aunque estén dormidos, les digo con el corazón en la mano que la vida te cambia por completo al ser mamá, que nunca nadie que no lo haya sido podrá imaginar lo maravillosamente increíble e inigualable que es esto… Y que si ya me di cuenta de ello, ahora es mi responsabilidad quererlo, valorarlo y aprovecharlo cada micro segundo de esta vida tan increíble que Dios, Máximo y yo hemos creado.
Los adoro con todo mi cuerpo, alma y corazón!