Hace 1 mes, el día de Navidad, los abuelos te regalaron un triángulo que hace ruiditos… Está muy padre porque se arma, se desarma, le metes unas pelotitas, le aprietas unos botoncitos para que se escuche música y otros para que se escuchen ruidos de animales… Te encanta y ya lo sabes jugar, puedes estar echando las pelotitas un sin fin de veces… Pero es muy chistoso cuando no estamos jugando y por algo pasamos junto al triángulo y te voy cargando jaja, casi te echas de clavado para ir a jugar y si no te dejo, te pones como tablita y te quieres escurrir de entre mis brazos para que te deje ahí… Muy decidido el muchachito.