Tomás:
Te quiero contar, por si no lo sabías, que a tus papás les encantan los símbolos. Hoy estamos en una fiesta llena de símbolos porque queremos agradecer a Dios por tu vida y pedirle que te invite a su grupo de hijos especiales. Bueno, aunque hijo especial ya eres desde que naciste, pero hoy lo formalizamos a través de los símbolos del bautizo.
Pensé mucho en ti y en tus papás, en que tenía que encontrar un símbolo muy especial para regalarte en este día, y que tuviera muchos significados para ti el día de hoy y el resto de tu vida. Al final creo que no por casualidad llegó a mí la idea de un pájaro. ¡No sabes la alegría que sentí por que supe que era el símbolo perfecto para ti! Y más, cuando tus papás opinaron lo mismo.
Un pájaro: que principalmente representa al Espíritu Santo que recibes hoy en tu bautizo. El Espíritu de Dios que te invita a volar en la parvada de los hijos de Dios. Que te da la fuerza para volar llenando e irradiando amor a los que te rodean. Que te invita a vivir en comunidad, con tu prójimo dando y viviendo el cielo para los demás.
Un pájaro con alas: ¡Sí igual que Pedro! Alas iguales, pero diferentes; alas que te permiten llegar lejos en la vida, pero siempre acompañado de tu hermano.
Un pájaro alegre y colorido: ¡Igual que tu papá! Con una capacidad extraordinaria de hacerse amigo hasta de las piedras, de sonreír, y de disfrutar la vida con una intensidad que solo él sabe.
Un pájaro fuerte y frágil a la vez: ¡Igual que tu mamá! Que puede soñar, imaginar y crear mundos llenos de flores y horizontes llenos de sol; y que puede trabajar con todo su amor y dedicación para llegar tan lejos como lo imaginó, a pesar de la lluvia, el viento o el frío.
A nosotros tus padrinos nos toca cuidar al pajarito en su jaulita, protegerlo mientras sea pequeño, y no sepa bien cómo empezar a volar, o por dónde debe ir. Queremos ser para ti tus protectores, consejeros y acompañantes en este hermoso camino llamado vida Cristiana. Una vida hermosa que has venido tú a llenar y que sin duda te va a gustar.
Te damos gracias Padre por Tomás, por su vida y por Tu presencia en su vida y en la nuestra. Espíritu Santo guíalo siempre por tu camino.
Amen
Tu Madrina – Claudia