Una ves hace algunas semanas jugamos por una hora a retosar en la cama con Pedro, creo que acabo en drama porque nos pegamos todos.
Todavia al dia de hoy si te acostamos o acercamos a una cama, tu reacción inmediata es saltar y ponerte a revolotear, te avientas sobre los cojines, de espalda, de frente, te das marometas.. no te puedes controlar!
si hay que cambiarte es un problema (porque no haces lo mismo en el baño, o en el cambiador, solo en la cama)..
Y ya después de varios golpes contra la pared ahora mides las distancias y te cuidas un poquito mas, pero sigues volviéndote loquillo.. Loquillo Tomás!