Como buenos hermanos pelean, gritan, comparten, juegan, etc. Pero saben qué pasa de repente… cuando inconscientemente Pedro se da cuenta de que Tomás es más chico, lo cual muchas veces se le olvida… y le da ternura lo que dice. Puede ser un comentario naive o algo que quiere… y de pronto, como de la nada, Pedro hace carita, me voltea a ver con un efecto de complicidad y ahí es cuando sabemos que entiende que es el grande y le conmueven los comentarios lindos de su hermano pequeño… Como aquella vez que le preguntamos a Tomás si
El y Nico eran grandes amigos, y dijo: “Nooo, pequeños amigos”. Los amo!