Desde chiquito, cuando te iba a cortar las uñas quedamos en que me ibas a recordar diciendo algo con la metra de las uñas. Ese día dijiste uvas. Hasta el día de hoy te acuerdas. Y ahora, cuando comes uvas verdes, también nos acordamos de las uñas. Te amo, y ya te las cortas tí solito. Te amo infinitamente mi niño grande!